Un grupo de mujeres manejará un área de de conservación forestal en Alto Mayo en San Martín

San Martín.- La Asociación El Afluente Aguasclarino (AELAAC), compuesta por un grupo de mujeres organizadas, recibió la concesión forestal "Aguas Claras - Amangay" en el distrito de Pardo Miguel, provincia de Rioja, región San Martín, por parte de la Autoridad Regional Ambiental (ARA) del Gobierno Regional de San Martín (Goresam).

El responsable del Área de Conservación y Protección de Ecosistemas Forestales (ACPEF) del ARA San Martín, César Luciano Reátegui Fachín, destacó que la firma de un contrato de otorgamiento demostró el consentimiento para esta concesión N° 22-SAM/CON-CON-2024-003, por un periodo de 40 años renovables, con Resolución Directoral N° 548-2024-GRSM-ARASM/DGFFS.

Proteger los recursos naturales, preservar la diversidad biológica y promover la conservación de los bosques son los objetivos principales del acuerdo para ello se debe realizar actividades de investigación científica, formación ambiental, capacitación y gestión sostenible de los recursos naturales afirmando el flujo continuo de bienes y servicios ambientales a través de un enfoque territorial sostenible.

Durante la entrega del permiso, el oficial destacó que la situación evidencia una colaboración conjunta entre Goresam, todas las entidades participantes, la comunidad civil, por supuesto, nuestros socios en la adecuada administración de nuestros recursos naturales.

Fachín Eátegui indicó que el reciente permiso limita con la concesión Conservación Bosques de la Bella Durmiente, cuyos ecosistemas son cruciales para conservar la diversidad biológica y resguardar los recursos naturales.  “De acuerdo con él, la Concesión para la Conservción “Aguas Claras – Amangay” tendrá un rol relevante en la protección de la conectividad ecológica”.

La presidenta de la AELAAC, Yovany Cayao Fernández, se comprometió a trabajar en la concesión para contribuir al futuro de la región, actuando como actores clave en la conservación de los bosques del Alto Mayo. Esta labor beneficiará a las comunidades cercanas y a diversas especies de flora y fauna, como el pichico andino, el mono choro de cola amarilla, el gallito de las rocas andino, y especies maderables como el cedro, entre otros.

Fuente:Andina