Inauguración del modernizado albergue en Pucallpa resalta el compromiso de la Municipalidad Distrital de Yurúa

Pucallpa.- El pasado fin de semana, se celebró la inauguración de la renovación del albergue municipal de Yurúa, ubicado en la ciudad de Pucallpa. Este espacio, destinado a pacientes y estudiantes del distrito, ha sido transformado gracias a la actual gestión de la Municipalidad Distrital de Yurúa.

El alcalde Manuel Arévalo Mogrovejo, el sub gerente de Desarrollo Social, Daniel Dávila Ordoñez, junto con otros funcionarios, la regidora Patricia Quinto Tello, el presidente de Aconadysh Alfonso Rengifo Pérez, los residentes del albergue, trabajadores e invitados, participaron en la ceremonia. Todos ellos elogiaron este proyecto que beneficia principalmente a los pacientes de las comunidades nativas.

El alcalde Arévalo destacó que este proyecto es parte de su compromiso de gestión para mejorar la calidad de atención de los pacientes y sus acompañantes que llegan a Pucallpa para recibir tratamiento médico, así como de los estudiantes alojados en el albergue. Ahora, todos ellos disfrutan de una infraestructura moderna y adecuada.

Luis Garcia Campos, uno de los residentes del albergue, expresó su agradecimiento por el trabajo realizado, ya que este proyecto ha permitido que él y su pareja se beneficien de los cuidados del servicio social que ofrece la municipalidad, incluyendo la alimentación, el acompañamiento y ahora, un lugar cómodo para permanecer mientras su paciente se recupera.

Durante la ceremonia, el ingeniero Marcos Vázquez Aguilar, residente del mejoramiento del albergue municipal, entregó oficialmente el acta de entrega del proyecto al alcalde Manuel Arévalo. Cada dormitorio cuenta con colchones nuevos, ventiladores, camarotes, baños y duchas. Respetando sus costumbres también se construyó una cocina de tuhspa.

La ceremonia de inauguración concluyó con el tradicional rompimiento de champan, el derramamiento de masato de la mocahuita y el corte de la cinta.

Es importante destacar que el albergue acoge a pacientes de diferentes etnias del distrito de Yurúa, como los ashéninkas y yaminahuas. Se les proporciona alimentos sin perder sus propias costumbres, siempre bajo la supervisión de la dieta recomendada por los médicos.

Al inicio de la gestión, el albergue se encontraba en condiciones deplorables, con pacientes durmiendo en el suelo, sin colchones, sin utensilios y cocinando como podían. Hoy, esa realidad es cosa del pasado y las condiciones son totalmente diferentes, dando un nuevo rostro al distrito de Yurúa.